Tapabocas en la Invasión
No estoy segura de que la palabra invasión sea correcta, pero así se le llama a el lugar donde están construyendo cambuches mis nuevos amigos. Hoy fuí a llevarles tapabocas y me tuvieron toda la mañana feliz y con una constante sonrisa. Mi visita de hoy me hizo ver lo irrelevante de mis preocupaciones y el poder de las situaciones. No hay mucho que perder cuando todo se disfruta y ese super poder jamás lo va a tener el que tiene miedo a caer. Así que me voy bien contenta a trabajar, porque al fin y al cabo si pierdo mi negocio por esta pandemia la caída es la que más debo disfrutar.